Gadafi amenazó a su pueblo

El dictador libio descalificó a los manifestantes 

En un discurso el líder de Libia, Muamar al Gadafi aseguró que no dejará el poder y que prefiere derramar “hasta la última gota” de su sangre, antes que claudicar.

RESUMEN EFE - Trípoli



El líder libio Muamar al Gadafi anunció ayer que “no dejará el poder” e hizo un llamamiento a sus partidarios para que salieran a la calle “ a proteger la revolución”.

En su discurso a la televisión estatal, Gadafi anunció también reformas para “una nueva república” y advirtió que si la situación no se normaliza en los próximos días encabezará un movimiento “con el apoyo de millones de habitantes del desierto que limpiará Libia casa por casa”.

El líder libio aseguró que no dimitirá y que él no se considera un presidente sino “un dirigente de la revolución”.

“Si yo fuera presidente os tiraría mi dimisión a la cara, pero yo soy el líder de la revolución, cogeré mi fusil, permaneceré en Libia y derramaré hasta la última gota de mi sangre”, aseguró en su discurso.

Los disturbios en Libia desde hace una semana han dejado centenares de muertos, pero según Gadafi son una “mentira” de los medios de comunicación.

Respecto a los manifestantes que reclaman justicia y libertad afirmó que “son unos jóvenes de 16 a 17 años que se drogan y están manipulados por los agentes de los servicios secretos extranjeros”.

Con un tono en ocasiones amenazante, en otras conciliador, aseguró que aquellos que levantan sus armas contra Libia son merecedores de la pena de muerte y en esta ocasión no habrá perdón aunque “lo pidan sus familias”.

El líder preguntó en su discurso: “¿Queréis que los Estados Unidos ocupen Libia como han hecho con Irak y Afganistán?”.

Después de las amenazas, Gadafi ofreció la posibilidad de elaborar una Constitución y nuevas leyes, a la vez que anunció la creación de nuevas administraciones locales.

“Mañana podemos comenzar una nueva república” y prometió a sus compatriotas la posibilidad de disponer del petróleo y de otras riquezas del país” que los libios se repartirían.

Las reacciones al discurso de Gadafi no tardaron en darse, tanto en Libia como en la comunidad internacional y si la televisión estatal difundió imágenes que presentan escenas de alborozo en Trípoli, los habitantes de esta ciudad recibieron el discurso con rechazo.

Dimisión - Gadafi, sin Mininterior

El ministro de Interior libio y general del Ejército, Abdul Fatah Yunis, anunció ayer su dimisión e instó a las fuerzas armadas a unirse al pueblo en su lucha por sus legítimas demandas. En un comunicado que leyó en una grabación difundida por la cadena de televisión Al Yazira, el ministro dijo que se une a “la revolución del 17 de febrero”. “El bombardeo contra la población civil es lo que me ha hecho unirme a la revolución, nunca imaginé que íbamos a llegar a disparar contra la gente”. Yunis aseguró además que la Libia del líder, Muamar el Gadafi, “se ha desmoronado” y que el régimen ha “traicionado a la revolución”. “Expreso mi fe en las demandas del pueblo y en su legitimidad”, dijo el general y subrayó que “las Fuerzas Armadas deben estar al servicio de la gente”. Yunis era uno de los más cercanos colaboradores de Gadafi e hizo parte del movimiento de los entonces coroneles que, junto a él, llevaron a cabo el golpe de Estado para acceder al poder en 1969.

Efectos - Con los ojos en Libia

Masiva renuncia Por lo menos ocho embajadores libios (en Estados Unidos, Polonia, India, Indonesia, Australia, Malasia, Bangladesh y ante la Liga Árabe), renunciaron por inconformidad con la violenta represión de las protestas populares contra el régimen de Gadafi. Pidió su salida El embajador de Libia en Washington, Ali Suleiman Aujali, pidió ayer la salida del líder libio Muamar al Gadafi, e instó a la comunidad internacional a que actúe en la crisis política por la que atraviesa este país. ONU condena El Consejo de Seguridad de la ONU condenó ayer los actos de violencia contra la población libia por parte del régimen de su gobernante, Muamar al Gadafi, a quien le pidieron que asuma responsabilidades por lo ocurrido y cumpla con la obligación de proteger a los civiles. EE.UU. La secretaria de Estado de EU, Hillary Clinton, afirmó ayer que el “baño de sangre” en Libia, donde los muertos por la represión se cuentan por centenares, es “completamente inaceptable” y “tiene que parar”. Agregó, en nombre de la comunidad internacional, que “el Gobierno de Muamar al Gadafi tiene que respetar los derechos universales del pueblo libio”. Canadá Canadá decidió evacuar a todos sus ciudadanos que se encuentran en Libia tras el discurso pronunciado ayer por Gadafi. “El Gobierno de Canadá condena de forma enérgica el uso de fuerza contra manifestantes inocentes. El escandaloso abuso del poder de las fuerzas de seguridad debe cesar”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, Lawrence Cannon.

Reacciones - A. Latina

RESUMEN - AP y EFE Dirigentes latinoamericanos reaccionaron ayer en torno a la crisis en Libia, entre ellos el mandatario nicaragüense Daniel Ortega quien dijo haber expresado telefónicamente su solidaridad a Muamar al Gadafi. Sostuvo Ortega que las autoridades libias “están buscando cómo dialogar, defender la unidad de la nación para que no se vaya a desintegrar el país, que no vaya a darse una anarquía en el país”. “Y yo le expresaba a Muamar al Gadafi, líder de la revolución libia, lo que es elemental: en momentos difíciles se pone a prueba la lealtad”, agregó el mandatario nicaragüense. En tanto, el líder cubano Fidel Castro advirtió que Estados Unidos podría promover una invasión a la nación árabe. Desde sus habituales “Reflexiones” que publica en la prensa cubana comentó que existe una campaña mediática en contra de Gadafi. “Lo que para mí es absolutamente evidente es que al Gobierno de Estados Unidos no le preocupa en absoluto la paz en Libia, y no vacilará en dar a la Organización del Tratado del Atlántico Norte la orden de invadir ese rico país, tal vez en cuestión de horas o muy breves días”, agregó el líder cubano. Desde Buenos Aires, el gobierno de la presidenta argentina Cristina Fernández abogó por “una pronta solución pacífica” en Libia. “El gobierno argentino expresa su profunda preocupación por la grave situación en Libia, lamenta la pérdida de vidas y los actos de violencia acaecidos en los enfrentamientos”, expresó la cancillería. El canciller brasileño, Antonio Patriota, dijo por su parte, que Brasil “repudia los actos de violencia contra manifestantes desarmados, en tanto el Gobierno de Perú, que condenó “enérgicamente” la represión de los manifestantes en Libia, pidió a la ONU que intervenga “con medidas eficaces” para “fomentar la paz y la tranquilidad” en ese país.

      Fuente:elmundo.com