Los errores científicos dieron siete descubrimientos importantes.
Algunos de los errores científicos no siempre terminan siendo un fracaso y un derroche de dinero total. Aveces generan nuevos descubrimientos muy interesantes.
Hay ejemplos bastante famosos como la viagra, que en principio fue ideada para tratar la angina de pecho. Aunque este medicamento no consiguió aumentar el aporte de sangre al corazón, los pacientes que lo probaron notaron un curioso efecto secundario%85 y es que otra parte de sus cuerpos tenían un aporte de sangre extra.
La famosa penicilina, el bromuro potásico e incluso el mismísimo Big Bang, se encontraron casualmente, por un accidente.
Siete errores científicos que proporcionaron descubrimientos importantes:
La Penicilina
El clásico. Alexander Fleming descubrió que un moho había contaminado unos cultivos bacterianos. No obstante, el área que rodeaba el moho, ¡estaba libre del virus! Fleming predijo que tuvo un efecto antibacteriano. El descubrimiento le valió un premio Nobel.
El Bromuro potásico
No hace demasiado tiempo, la masturbación era vista como el padre de todos los males. Eras el mismísimo diablo si tan solo pensabas en ello. Se intentó hacer de todo para evitarlo, hasta que se descubrió el bromuro potásico. Los pacientes a los que se administraba tuvieron un menor índice de masturbación , y se proclamó como la solución definitiva. Poco después, se vio que no es que hubieran menos toqueteos, si no que había menos de todo. Menos actividad en cualquier cosa. Lo rebautizaron como "sedante".
El Big Bang
Los señores Arno Penzias y Robert Wilson estaban un día atareados arreglando una antena de comunicación por satélite. Entonces, probaron a apuntar a la Vía Láctea. Mientras lo movían aquí y allá, se dieron cuenta de que había un ruido de fondo que no debía estar. Aparecía apuntaran a donde apuntaran, hubiera objetos celestes o no. Cuando echaron un vistazo al interior, vieron nidos de palomas (aquello estaría hecho un cristo). Pero tras limpiarlo, el ruido persistía. Resultó que lo que captaban era la radiación cósmica de fondo, que se considera el residuo del Big Bang. Nuevamente un premio Nobel fue otorgado por este accidental descubrimiento.
Los Rayos X
Un fisico llamado,William Roentgen, estaba haciendo pasar una corriente eléctrica por un tubo de vidrio con un gas en su interior. El gas brilló inesperadamente. Para continuar con su experimento sin el molesto brillo, recubrió el tubo con un grueso papel.
El brillo se mantuvo, pero esta vez procedió de una pantalla tratada con elementos pesados, situada unos metros a distancia. Tras unos experimentos, comprendió que había descubierto un rayo que pasaba a través de elementos ligeros pero no de los pesados: los rayos X.
El cristal de seguridad
Se descubrió gracias a la falta de higiene. Ocurrió que un investigador torpe tiró un vaso al suelo. Entonces, aunque se rompió, no se dividió en afilados trocitos. Interesándose por el extraño suceso, preguntó qué había contenido: una solución de nitrato de celulosa, parecido a un plástico líquido. Por lo visto, no se había limpiado bien, al solidificar y quedar como una fina capa transparente: recubrió el cristal interior e impidió su fragmentación.
La famosa sacarina
El señor Fahlberg trabajaba con alquitrán de carbón, llegando a casa con las manos más negras que un pozo de petróleo. Tal cual llegó, probó unos bollos que hizo su mujer, sin lavarse las manos ni nada. Le supieron dulces. Le preguntó a su mujer si tenían algo especial, pero ella le dijo que no y que sabían como siempre. Resultó que eran sus manos las que sabían ha dulce.
Algunos de los errores científicos no siempre terminan siendo un fracaso y un derroche de dinero total. Aveces generan nuevos descubrimientos muy interesantes.
Hay ejemplos bastante famosos como la viagra, que en principio fue ideada para tratar la angina de pecho. Aunque este medicamento no consiguió aumentar el aporte de sangre al corazón, los pacientes que lo probaron notaron un curioso efecto secundario%85 y es que otra parte de sus cuerpos tenían un aporte de sangre extra.
La famosa penicilina, el bromuro potásico e incluso el mismísimo Big Bang, se encontraron casualmente, por un accidente.
Siete errores científicos que proporcionaron descubrimientos importantes:
La Penicilina
El clásico. Alexander Fleming descubrió que un moho había contaminado unos cultivos bacterianos. No obstante, el área que rodeaba el moho, ¡estaba libre del virus! Fleming predijo que tuvo un efecto antibacteriano. El descubrimiento le valió un premio Nobel.
El Bromuro potásico
No hace demasiado tiempo, la masturbación era vista como el padre de todos los males. Eras el mismísimo diablo si tan solo pensabas en ello. Se intentó hacer de todo para evitarlo, hasta que se descubrió el bromuro potásico. Los pacientes a los que se administraba tuvieron un menor índice de masturbación , y se proclamó como la solución definitiva. Poco después, se vio que no es que hubieran menos toqueteos, si no que había menos de todo. Menos actividad en cualquier cosa. Lo rebautizaron como "sedante".
El Big Bang
Los señores Arno Penzias y Robert Wilson estaban un día atareados arreglando una antena de comunicación por satélite. Entonces, probaron a apuntar a la Vía Láctea. Mientras lo movían aquí y allá, se dieron cuenta de que había un ruido de fondo que no debía estar. Aparecía apuntaran a donde apuntaran, hubiera objetos celestes o no. Cuando echaron un vistazo al interior, vieron nidos de palomas (aquello estaría hecho un cristo). Pero tras limpiarlo, el ruido persistía. Resultó que lo que captaban era la radiación cósmica de fondo, que se considera el residuo del Big Bang. Nuevamente un premio Nobel fue otorgado por este accidental descubrimiento.
Los Rayos X
Un fisico llamado,William Roentgen, estaba haciendo pasar una corriente eléctrica por un tubo de vidrio con un gas en su interior. El gas brilló inesperadamente. Para continuar con su experimento sin el molesto brillo, recubrió el tubo con un grueso papel.
El brillo se mantuvo, pero esta vez procedió de una pantalla tratada con elementos pesados, situada unos metros a distancia. Tras unos experimentos, comprendió que había descubierto un rayo que pasaba a través de elementos ligeros pero no de los pesados: los rayos X.
El cristal de seguridad
Se descubrió gracias a la falta de higiene. Ocurrió que un investigador torpe tiró un vaso al suelo. Entonces, aunque se rompió, no se dividió en afilados trocitos. Interesándose por el extraño suceso, preguntó qué había contenido: una solución de nitrato de celulosa, parecido a un plástico líquido. Por lo visto, no se había limpiado bien, al solidificar y quedar como una fina capa transparente: recubrió el cristal interior e impidió su fragmentación.
La famosa sacarina
El señor Fahlberg trabajaba con alquitrán de carbón, llegando a casa con las manos más negras que un pozo de petróleo. Tal cual llegó, probó unos bollos que hizo su mujer, sin lavarse las manos ni nada. Le supieron dulces. Le preguntó a su mujer si tenían algo especial, pero ella le dijo que no y que sabían como siempre. Resultó que eran sus manos las que sabían ha dulce.
No hay comentarios:
Publicar un comentario