La creación y construcción de androides capaces de realizar tareas imposibles para los humanos, comenzaran en una década como mucho, ya que los avances en tecnología asi lo demuestran.
Se pueden ir mostrando las novedades que están apareciendo, el tema es manejado en algunos países dentro del mayor secreto posible, por motivos bastante obvios. Las capacidades de los androides pueden ser enormemente peligrosas en algunas circunstancias.
Exponemos algunos ejemplos:
El Robot ASIMO
Robot Asimo puede leer el pensamiento de los humanos sin necesidad de ningún implante cerebral en la persona, eso es lo que demuestra el último avance tecnológico presentado por las empresas japonesas Honda y Shimadzu: el Interfaz Cerebro-Máquina (Brain-Machine Interface o BMI), con la que por primera vez el usuario puede dar órdenes a un robot sólo con el pensamiento y un casco, como expresé en un artículo sobre los derivados de la Ingeniería inversa.
El superordenador militar Correcaminos
El superordenador militar estadounidense llamado Correcaminos ha conseguido superar los 1.000 billones de operaciones por segundo, que lo convierte en la computadora más veloz del planeta, superando el petaflop y cuyo propósito central será trabajar con armas nucleares o controlar armas robóticas y simular explosiones atómicas.
Para dar una idea de la velocidad de la supercomputadora, expertos de IBM indicaron que si cada uno de los 6.000 millones de habitantes del planeta usaran una computadora personal y trabajaran 24 horas al día, tardarían 46 años hacer lo que Roadrunner hace en un solo día.
Estas grandes capacidades serán empleadas para dirigir a los trabajadores o soldados robots, mientras se esperan los futuros circuitos de fotones, que dotaran a la inteligencia artificial de mayor autonomía. Así es, robots pensantes y unidos a supercomputadoras para apoyarlos en formas aún no del todo imaginables.
Los futuros "complementos" biónicos que encontraremos tan normales como el último modelo de gafas de sol. Esta vez, se trata de las primeras lentillas biológicamente seguras están dotadas de un microchip electrónico, diseñadas por un equipo científico de la Universidad de Washington. Llevan un zoom incorporado, que permitirá aumentar la visión de los objetos enfocados, pero también dichas lentes podrán ser útiles en los futuros androides. Los mismos científicos las han definido como una plataforma para la "supervisión", que los nuevos androides sabrán aprovechar en plenitud.
El Robot Urey en busca de vida extraterrestre
Para averiguar si existen otras formas de vida en el universo nace este sorprendente robot, el Urey, con una sensibilidad un millón de veces superior a la de cualquier instrumento desarrollado hasta la fecha, puede analizar analizar moléculas específicas que están asociadas con la vida, como el ADN, el ARN o los aminoácidos y determinar su origen o procedencia. Para probar este robot nada parece existir nada mejor que enviarlo a Marte y probar su sofisticada tecnología. La gran sensibilidad robótica era impensada hace unos pocos años. En no mucho tiempo, nada se les pasará a estos robots "supersabuesos".
Se está preparando la creación de músculos artificiales, pero no hablamos sólo de músculos artificiales que imiten con gran exactitud a los músculos humanos, si no que además los superaran largamente.
Este avance ha sido creado por investigadores de la Universidad de Texas, y serán capaces de expandirse y contraerse hasta en un 220% en cuestión de milisegundos con tan solo aplicarle un simple voltaje, son más fuerte que el acero y mas duros que el diamante, esto se logra gracias a la nanotecnología, concretamente millones de nanofibras trenzadas unas con otras creando así un material flexible y a la vez extremadamente fuerte, liviano y súper resistente.
Tiene una altísima resistencia a la temperatura (pueden operar desde los -196º C hasta los 1538º C), podrán ser utilizados en operaciones extremas terrestres pero también en futuras misiones espaciales.
Los científicos y ingenieros y de la NASA y GM trabajan en conjunto, en virtud del Acuerdo bajo la Ley del Espacio (Space Act Agreement), en el Centro Espacial Johnson de la agencia espacial en Houston, para construir nuevos robots humanoides capaces de trabajar a la par de las personas y con el tiempo sustituirlas.
Por medio del uso de tecnologías avanzadas de control, sensores, visualización e inteligencia artificial, los robots del futuro podrían ayudar a los astronautas durante las peligrosas misiones espaciales y también a GM en la construcción de automotores y plantas más seguros.
Las dos organizaciones, con la cooperación de los ingenieros de Oceaneering Space Systems, de Houston, desarrollan y construyen las próximas versiones del Robonaut. Robonaut 3 o R3, es un autómata más rápido, más diestro y tecnológicamente más avanzado de todo lo construido hasta la actual fecha.
El desarrollo de pilas de tritio, pasarán de usarse en linternas y baratijas a generar la energía eléctrica suficiente que necesiten los androides.
Un robot como el de la película de ciencia ficción TERMINATOR, aunque más pacífico, eso se espera, puede ser parte de la realidad diaria dentro de muy poco tiempo.
Los avances en este campo están muy avanzados aunque se mantiene relativamente en secreto, por razones obvias.
Se pueden ir mostrando las novedades que están apareciendo, el tema es manejado en algunos países dentro del mayor secreto posible, por motivos bastante obvios. Las capacidades de los androides pueden ser enormemente peligrosas en algunas circunstancias.
Exponemos algunos ejemplos:
El Robot ASIMO
Robot Asimo puede leer el pensamiento de los humanos sin necesidad de ningún implante cerebral en la persona, eso es lo que demuestra el último avance tecnológico presentado por las empresas japonesas Honda y Shimadzu: el Interfaz Cerebro-Máquina (Brain-Machine Interface o BMI), con la que por primera vez el usuario puede dar órdenes a un robot sólo con el pensamiento y un casco, como expresé en un artículo sobre los derivados de la Ingeniería inversa.
El superordenador militar Correcaminos
El superordenador militar estadounidense llamado Correcaminos ha conseguido superar los 1.000 billones de operaciones por segundo, que lo convierte en la computadora más veloz del planeta, superando el petaflop y cuyo propósito central será trabajar con armas nucleares o controlar armas robóticas y simular explosiones atómicas.
Para dar una idea de la velocidad de la supercomputadora, expertos de IBM indicaron que si cada uno de los 6.000 millones de habitantes del planeta usaran una computadora personal y trabajaran 24 horas al día, tardarían 46 años hacer lo que Roadrunner hace en un solo día.
Estas grandes capacidades serán empleadas para dirigir a los trabajadores o soldados robots, mientras se esperan los futuros circuitos de fotones, que dotaran a la inteligencia artificial de mayor autonomía. Así es, robots pensantes y unidos a supercomputadoras para apoyarlos en formas aún no del todo imaginables.
Los futuros "complementos" biónicos que encontraremos tan normales como el último modelo de gafas de sol. Esta vez, se trata de las primeras lentillas biológicamente seguras están dotadas de un microchip electrónico, diseñadas por un equipo científico de la Universidad de Washington. Llevan un zoom incorporado, que permitirá aumentar la visión de los objetos enfocados, pero también dichas lentes podrán ser útiles en los futuros androides. Los mismos científicos las han definido como una plataforma para la "supervisión", que los nuevos androides sabrán aprovechar en plenitud.
El Robot Urey en busca de vida extraterrestre
Para averiguar si existen otras formas de vida en el universo nace este sorprendente robot, el Urey, con una sensibilidad un millón de veces superior a la de cualquier instrumento desarrollado hasta la fecha, puede analizar analizar moléculas específicas que están asociadas con la vida, como el ADN, el ARN o los aminoácidos y determinar su origen o procedencia. Para probar este robot nada parece existir nada mejor que enviarlo a Marte y probar su sofisticada tecnología. La gran sensibilidad robótica era impensada hace unos pocos años. En no mucho tiempo, nada se les pasará a estos robots "supersabuesos".
Se está preparando la creación de músculos artificiales, pero no hablamos sólo de músculos artificiales que imiten con gran exactitud a los músculos humanos, si no que además los superaran largamente.
Este avance ha sido creado por investigadores de la Universidad de Texas, y serán capaces de expandirse y contraerse hasta en un 220% en cuestión de milisegundos con tan solo aplicarle un simple voltaje, son más fuerte que el acero y mas duros que el diamante, esto se logra gracias a la nanotecnología, concretamente millones de nanofibras trenzadas unas con otras creando así un material flexible y a la vez extremadamente fuerte, liviano y súper resistente.
Tiene una altísima resistencia a la temperatura (pueden operar desde los -196º C hasta los 1538º C), podrán ser utilizados en operaciones extremas terrestres pero también en futuras misiones espaciales.
Los científicos y ingenieros y de la NASA y GM trabajan en conjunto, en virtud del Acuerdo bajo la Ley del Espacio (Space Act Agreement), en el Centro Espacial Johnson de la agencia espacial en Houston, para construir nuevos robots humanoides capaces de trabajar a la par de las personas y con el tiempo sustituirlas.
Por medio del uso de tecnologías avanzadas de control, sensores, visualización e inteligencia artificial, los robots del futuro podrían ayudar a los astronautas durante las peligrosas misiones espaciales y también a GM en la construcción de automotores y plantas más seguros.
Las dos organizaciones, con la cooperación de los ingenieros de Oceaneering Space Systems, de Houston, desarrollan y construyen las próximas versiones del Robonaut. Robonaut 3 o R3, es un autómata más rápido, más diestro y tecnológicamente más avanzado de todo lo construido hasta la actual fecha.
El desarrollo de pilas de tritio, pasarán de usarse en linternas y baratijas a generar la energía eléctrica suficiente que necesiten los androides.
Un robot como el de la película de ciencia ficción TERMINATOR, aunque más pacífico, eso se espera, puede ser parte de la realidad diaria dentro de muy poco tiempo.
Los avances en este campo están muy avanzados aunque se mantiene relativamente en secreto, por razones obvias.
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